La cantante israelí Eden Golan se ha clasificado para la final de Eurovisión a pesar de las protestas en Malmö (Suecia), donde se celebra el certamen.
La artista, de 20 años, se enfrentó a una reacción mixta durante la semifinal, con vítores y abucheos del público.
Golan agradeció el apoyo recibido, declaró sentirse «abrumada por las emociones» y honrada de representar a Israel.
A pesar de la polémica suscitada por la participación de Israel debido al conflicto con Hamás, Golan afirmó que está dedicada a su música.
Las protestas en apoyo de Palestina, incluida La encabezada por Greta Thunberg, tuvieron lugar fuera del recinto, y también se produjeron pequeñas contraprotestas.
A pesar de las tensiones, Golan se mantuvo firme y recibió un mensaje de apoyo del Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en las redes sociales.
Las protestas, aunque pacíficas en su mayor parte, llevaron a reforzar las medidas de seguridad, con policías armados apostados frente al hotel de Golan.
Sin embargo, Golan permaneció firme en su postura: «Estoy aquí, estoy haciendo lo que más me gusta, estoy centrada en la música».