La guerra civil en Iraq se le atribuye mayormente al grupo de extremistas musulmanes conocido como ISIS (ISIL), o el Estado Islámico. Este grupo se empezó a apoderar de zonas de Iraq y Siria, con la idea de crear su propio estado musulmán sunita. Sin embargo, hay muchas más tribus musulmanas sunitas que están involucradas, y no todas comparten la ideología y meta de ISIS. Algunas como la milicia Mujahiden y Ansar Al-Sunna, apoyan al grupo. Pero la Armada Islámica Salafista, les retiró el apoyo. La complicada situación en Iraq ha llevado a la intervención de EEUU, para tratar de llegar a una pronta resolución, ya que el gobierno iraquí no puede manejar la situación. También ha llevado al éxodo de las minorías religiosas, ya que son un blanco constante de los grupos extremistas.