Unos mil extremistas salieron de los barrios provinciales de la ciudad siria de Alepo hacia Idleb. Antsd e abandonar sus posiciones, los terroristas detonaron sus centros de mando y almacenes de armas y comida, una acción que refleja su tendencia criminal que a lo largo de cuatro años propagó la muerte y la destrucción en la ciudad. La población festejó la expulsión de estos grupos de su territorio y festejó en las calles de la urbe, manifestaciones espontáneas de celebración que desmienten las acusaciones occidentales contra el gobierno sirio de atacar y matar de hambre a su propio pueblo.