La Policía Nacional liberó esta mañana a una mujer víctima de trata con fines de explotación sexual. La mujer, de origen rumano, inició una relación sentimental a los 12 años de edad en su país con un hombre 27 años mayor que ella, que la mantuvo bajo su control mediante amenazas y agresiones hasta que cumplió la mayoría de edad. Fue entonces cuando fue forzada a viajar a España para ejercer la prostitución en locales de alterne de Palencia y Plasencia. Los agentes también han liberado al hijo de 5 años que la víctima tuvo con su captor. El niño se encontraba secuestrado en su país de origen para así obligar a la madre a prostituirse. Dos miembros de la organización, que retenían a la mujer en España, han sido detenidos.