El drama que viven cada lunes, en la Policía Nacional en Santiago, los delivery, mensajeros, mototaxis y otros ciudadanos que utilizan una motocicleta como medio de transporte para su trabajo, es una experiencia que desborda la paciencia y cuestiona el sistema.br br Motocicletas de todas las denominaciones son incautadas en los operativos ordenados por el general Juan Bautista Jiménez Reynoso, director local de la Policía, quien hace alarde de que con esta acción garantiza la paz y la seguridad en Santiago.br br “Todos aquellos ciudadanos que no se quieran ajustar a la ley, nosotros estaremos de frente, trabajando para prevenir la comisión de delitos en motocicletas, porque hay un alto porcentaje de delitos que es en este transporte que se cometen”, ha dicho Jiménez Reynoso, quien anteriormente ordenó operativos contra los motoristas que se cubrían sus rostros para la protección solar. La medida solo permaneció algunos días.